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Furia en la Villa Obrera por un polémico operativo de seguridad
Un polémico operativo de seguridad, que dejó a jugadores menores de edad a la intemperie, provocó furia en el Club Atlético Independiente Villa Obrera.
POR REDACCIÓN
Explotó la polémica en el futbol local por un operativo de seguridad que levantó polvareda en las redes sociales. El pasado fin de semana en el predio de Aberastain, en Pocito, la seguridad policial de la Liga Sanjuanina de Fútbol fue cuestionada, tras el trato recibido por los jugadores de cuarta división del Club Atlético Independiente Villa Obrera (Caivo), en su mayoría menores de edad.
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Según informaron desde el club chimbero, durante el partido programado para la tarde del domingo, las autoridades policiales, encabezadas por el jefe de operativo y el árbitro de la primera división, ordenaron a los jugadores abandonar el terreno de juego, negándoles así la oportunidad de poder observar el encuentro de la primera división. “La decisión fue tomada sin brindar una explicación clara y generó gran indignación en los presentes”, afirmaron.
De acuerdo a lo expresado por el equipo visitante, la actitud de las fuerzas de seguridad fue “aún más cuestionable”, ya que prácticamente expulsaron a los jóvenes futbolistas, acompañándolos hasta la puerta del predio y dejándolos en la calle, sin la presencia del colectivo que los transportaría de regreso a su lugar de origen. Cabe destacar que debido a la economía de los clubes locales, por lo general los planteles de cuarta y primera división comparten el colectivo que los traslada cuando juegan de visitante.
Fue así que ante la falta de transporte, los jugadores se vieron obligados a permanecer junto a una pared, sin posibilidad de caminar o acceder a servicios básicos, como los baños. “Así los policías de San Juan, la seguridad de Liga Sanjuanina de Fútbol trataron a los jugadores de cuarta división del Caivo”, expresaron con indignación.
Por otro lado, desde el club chimbero manifestaron que cuando los jugadores de cuarta división de los demás clubes juegan en las instalaciones del Caivo, se les permite permanecer en el estadio hasta el final del partido, asignándoles una tribuna exclusiva para ellos y los miembros de la comisión directiva.
“Sabemos lo que cuesta un viaje. No podemos pedirles que se retiren sabiendo que esos jugadores se van con el plantel de primera división. Así no se trata a los chicos”, cerraron.