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Høibråten ignoró el saludo a River pero después le regaló un gol a Driussi
El capitán de Urawa Red Diamonds encendió la polémica al evitar saludar a los jugadores de River. Pero, para cerrar una noche para el olvido, durante el partido cometió un error que fue decisivo.
POR REDACCIÓN
Todo comenzó cuando los futbolistas de River se formaron para recibir a sus rivales con un saludo protocolar, tal como indica la organización del torneo. Mientras los japoneses ingresaban al campo uno por uno, el noruego Høibråten pasó sin estirar la mano, generando sorpresa entre los jugadores argentinos. Gonzalo Montiel y Germán Pezzella, ubicados al final de la fila, lo siguieron con la mirada, sin disimular el malestar.
Lejos de pasar desapercibido, el gesto del defensor escandinavo quedó en el foco de las cámaras. Sin embargo, la actitud altiva no le jugó a favor: fue protagonista directo en el segundo gol de River. En un intento de peinar la pelota hacia su arquero, terminó dividiéndola y le sirvió el balón a Sebastián Driussi, que no perdonó en el área y marcó el 2-0.
Curiosamente, minutos antes, Høibråten había generado un susto en el área rival, tras conectar de cabeza un centro que venció a Armani, pero el árbitro anuló el tanto por fuera de juego. Ese gol, que hubiese significado el empate parcial, fue invalidado sin discusión por el cuerpo arbitral.
River terminó ganando 3-1, pero la escena que quedó grabada fue la de un capitán que ignoró el saludo y terminó condicionando a su equipo con un error que lo dejó en evidencia. El Mundial de Clubes recién comienza, pero para Høibråten, este estreno ya quedó marcado.