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Verstappen recibió una penalización por un toque con Russell y cerró décimo
El neerlandés Max Verstappen no ocultó su enojo tras una carrera marcada por la tensión, que lo relegó al último puesto puntuable en el GP de España. Chocó a propósito a Russel.
POR REDACCIÓN
Max Verstappen finalizó décimo en el Gran Premio de Barcelona tras recibir una sanción de diez segundos por un toque con George Russell, en los últimos giros de una competencia en la que todo parecía descontrolarse para el piloto de Red Bull. Había terminado sexto, pero la penalización lo hizo caer en el clasificador.
La jornada fue intensa desde el principio. Verstappen, que apostó a una estrategia de tres paradas en boxes para sorprender a los McLaren de Oscar Piastri y Lando Norris (que terminaron 1° y 2°), se vio retrasado en la vuelta 52 por Liam Lawson y Oliver Bearman, quienes luchaban por el décimo lugar. Furioso, el neerlandés los insultó por radio y les dedicó gestos desde su monoplaza.
Un despiste de Kimi Antonelli provocó la entrada del auto de seguridad desde la vuelta 55 a la 60. Allí, Verstappen montó neumáticos duros, los únicos nuevos que le quedaban. En la relanzada, perdió tracción y Charles Leclerc lo igualó por afuera. Intentó doblar junto al Ferrari, pero terminó fuera de pista. El monegasco pidió sanción, mientras Russell, que venía detrás, también quedó comprometido por la maniobra del piloto de Red Bull.
Desde el muro de la escudería austríaca le recomendaron a su estrella que cediera la posición, pero Verstappen no lo hizo y apuntó directamente contra Russell, provocando un toque que no terminó con ninguno fuera, pero sí con una sanción. La decisión final lo dejó en la décima posición.
“No sé qué pasó. Se confundió, quizás pensó que en vez de ser un piloto de Fórmula 1 era uno de un simulador. Merecíamos terminar cuartos”, ironizó Verstappen una vez terminada la carrera.
La historia entre el neerlandés y el británico tiene antecedentes. En Baku 2023 ya habían chocado, al igual que en Imola. Pero fue en Qatar 2024 donde la relación se quebró. Tras una reunión con los comisarios, Verstappen explotó: “Todavía no puedo creer que alguien pueda ser así en la sala de comisarios. Para mí fue inaceptable, porque todos somos pilotos de carreras”.
Russell, por su parte, dijo que el sábado anterior había anticipado que se saldría de su camino a propósito para chocar a Verstappen y “ponerlo de cabeza contra el muro”. Una frase que, tras lo ocurrido en Barcelona, no hace más que encender la polémica entre ambos pilotos.