CanMe: la primera que logró certificación de cannabis medicinal

La empresa estatal sanjuanina CanMe acaba de alcanzar un logro histórico: recibió la certificación de producción orgánica para cannabis medicinal, convirtiéndose así en la primera y única del país en obtener este prestigioso reconocimiento. Este hito no solo posiciona a San Juan como un referente nacional en producción sustentable y de calidad, sino que también marca un antes y un después en un sector que se encuentra en pleno desarrollo. El camino hacia esta distinción fue arduo, implicando más de dos años y medio de planificación estratégica.

El proceso incluyó una meticulosa preparación del suelo, un cultivo bajo estrictas prácticas sustentables y una exhaustiva verificación técnica. La certificación fue otorgada por una entidad habilitada por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), lo que representa un paso fundamental hacia una producción de cannabis medicinal más segura, saludable y transparente en Argentina.

¿Qué implica un producto orgánico en el país?

En Argentina, un producto orgánico es aquel que se obtiene bajo un sistema de producción que prioriza la sustentabilidad. Esto significa que está libre del uso de agroquímicos de síntesis química y de organismos genéticamente modificados. El objetivo primordial es preservar la fertilidad del suelo, proteger la biodiversidad del ecosistema y, fundamentalmente, salvaguardar la salud de los consumidores.

La certificación orgánica está rigurosamente regulada por la Ley Nacional 25.127 y solo se concede si se cumplen estrictamente todas las normativas. Si bien es un proceso voluntario, se vuelve obligatorio para cualquier producto que aspire a ser comercializado bajo la etiqueta de orgánico, garantizando así la veracidad de su origen y proceso.

Una certificación clave para la industria del cannabis medicinal

Contar con una certificación orgánica no solo agrega un valor al producto, sino que también abre un abanico de nuevas oportunidades de comercialización. Esto incluye tanto el mercado interno, donde la demanda por productos naturales y seguros crece constantemente, como exigentes mercados internacionales con altos estándares de calidad.

Para la entidad sanjuanina, esta certificación se traduce directamente en un aceite medicinal producido de forma respetuosa con el ambiente, ofreciendo beneficios reales para la salud de quienes lo consumen, con la tranquilidad de saber que proviene de una fuente controlada y libre de químicos.

Por último, “La certificación orgánica demuestra que es posible producir cannabis medicinal con los más altos estándares, priorizando el cuidado del ambiente y de la salud pública”, concluyeron desde el equipo técnico de CanMe.