Caso Lucía Rubiño: Sobreseimiento o juicio, las opciones que del juez

Este martes vence el plazo establecido para la investigación penal preparatoria en el caso que conmueve a la comunidad sanjuanina: la joven Lucía Rubiño, la adolescente de 16 años que fue víctima de un grave accidente en el barrio de Los Profesionales y murió. La resolución que tomará el juez Javier Figuerola será clave para definir el futuro del proceso judicial: deberá decidir si acepta el pedido del Ministerio Público Fiscal de sobreseer a Juan Pablo Echegaray, o si, por el contrario, mantiene la imputación y eleva la causa a juicio.

El escenario en el que se encuentra el magistrado está marcado por una fuerte disputa entre las partes involucradas. Por un lado, la fiscalía, representada por Iván Grassi, coordinador de la Unidad Fiscal de Delitos Especiales, sostiene que existen elementos suficientes para solicitar el sobreseimiento del joven, argumentando que no hay pruebas concluyentes que lo vinculen directamente con el hecho. En su pedido formal, el fiscal solicitó que Echegaray sea desvinculado del proceso por presunto homicidio culposo ocurrido alrededor de las 3:20 del 15 de octubre de 2023.

Por otro lado, la querella, encabezada por el abogado Marcelo Fernández, sostiene que la evidencia presentada en la causa indica lo contrario. Fernández argumenta que el menor que atropelló a Lucía, admitió que Echegaray lo encandiló tras cruzar de carril e impactar a la joven y por esto el abogado insiste en que la causa siga su curso hacia el juicio.

El punto central de la discusión radica en la interpretación de la Ley 1.851 O del Código Procesal Penal de San Juan. Según esta norma, el sobreseimiento se dicta cuando no se ha cometido el hecho, cuando se establece la inocencia del imputado, o cuando la acción penal está extinguida o prescrita. Sin embargo, en casos donde existen pruebas controvertidas o diferentes interpretaciones sobre los hechos, la ley indica que el juez debe elevar la causa a juicio para que sean los tribunales los que determinen la responsabilidad. Esto también se refleja en el Código Procesal Penal Nacional en su artículo 357.

En este contexto, la postura del abogado de la familia, Marcelo Fernández, indica que “en este caso puntual, no solamente hay oposición, sino que los hechos están absolutamente controvertidos y, sobre una misma base probatoria, hay al menos dos miradas, dos observaciones completamente distintas y fundadas: la del fiscal y la de la defensa. Por lo tanto, lo más sensato y lo que debería hacer el juez, en virtud del artículo 122 (de la Ley 1.851 O), es que si hay oposición fundada, debe solicitarle al fiscal que siga la causa en el segundo estado y que formule la acusación para elevar la causa a juicio”.

El fallo del juez Figuerola será determinante para definir si el proceso continúa en la etapa de investigación o si, por el contrario, se cierra con un sobreseimiento. La decisión no solo tendrá impacto en la vida de Juan Pablo Echegaray, sino también en la búsqueda de justicia para Lucía y su familia, que esperan que se esclarezcan las responsabilidades y se haga justicia.

Clave

Si el juez Javier Figuerola dictamina el sobreseimiento podría enfrentarse a un dilema, ya que el Código Procesal Penal de San Juan prácticamente obliga al magistrado a seguir la línea del fiscal en la determinación que se toma tras la finalización de la investigación penal preparatoria. Es decir, que si el magistrado da lugar a la elevación de juicio podría ser apelado por la fiscalía. 

DATO I

La familia de Lucía Rubiño viene denunciando a la fiscalía por considerar que Juan Pablo Echegaray está teniendo trato privilegiado. Tan así es que el papá de Lucía, Jorge, dijo "lo quieren tratar de pobrecito, como que tiene que vivir sus 25 años". 

DATO II

Javier Figuerola, el juez de garantías de la causa Lucía Rubiño, fue conocido hace tiempo, ya que ocupó la dirección del Servicio Penitenciario Provincial. Incluso, dejó la su lugar en el servicio penitenciario tras ser elegido para ser juez en la Cámara de Diputados.