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Robo y faena clandestina de caballos: Queman restos en un baldío de Pocito
La incineración se hizo en un descampado en Pocito. La Policía Rural busca una camioneta verde, marca Rastrojero, como principal pista.
Un vecino de Pocito, este jueves sorprendió a dos personas quemando restos de caballos y vacas en un baldío cercano a la intersección de Calle 7 y Chacabuco del departamento Pocito, en la zona conocida como Costa Canal. El hecho, que fue grabado en video, llegó a las autoridades de seguridad de la provincia, que este viernes iniciaron una investigación para identificar a los responsables, los cuales, presuntamente, estarían vinculados al robo y la faena clandestina de equinos. Tema que ha cobrado relevancia en la provincia tras el informe de DIARIO HUARPE, que no solo reveló el hallazgo de más de 300 esqueletos de caballosen un campo del distrito El Bosque, sino también la existencia de una red de robo, faena clandestina y distribución de carne en el mercado interno sin controles sanitarios.
"La causa ya está en manos de la Unidad Fiscal de Investigación Genérica de la provincia y se está trabajando sobre una línea investigativa que tiene como punto clave la aparición de una camioneta Rastrojero de color verde, vista en el lugar de los hechos", confirmó a DIARIO HUARPE, Mario Domínguez, jefe de la Policía Rural de San Juan. "Lamentablemente, en las imágenes aportadas no se puede ver la patente del vehículo, pero estamos buscando registros de cámaras de seguridad en las cercanías para poder dar con los propietarios", explicó el jefe policial.
El baldío donde se llevó a cabo la quema de los restos se encuentra a casi un kilómetro de la calle 7 y Chacabuco, en una zona que, a pesar de su cercanía con una finca, parece haber sido elegida por su aislamiento.
Los trabajadores de la finca no reportaron haber visto nada extraño, solo las personas que grabaron el video señalaron que los responsables del fuego eran dos hombres mayores que vigilaban la hoguera desde una rastrojera verde, mientras la densa nube de humo cubría el área.
El personal de la Policía Rural realizó una inspección ocular en el sitio, confirmando que entre las cenizas había huesos tanto de caballos como de vacas.
"Hay huesos de diferentes tamaños: los largos son de caballos y los más cortos y gruesos, de vaca", detalló Domínguez, quien además subrayó que, por la cantidad de restos encontrados, se sospecha que provienen de carnicerías grandes. "Esto no es de un faenador chico, esto es de uno grande", sentenció el jefe policial. Es decir, los restos podrían ser el resultado de faena clandestina a gran escala.
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Eliminar las pruebas
Una de las hipótesis principales que maneja la policía es que los responsables estaban intentando destruir estos restos, porque son pruebas de faenamientos ilegales.
"Por la actitud de las personas que se encontraban en el lugar y el método que estaban utilizando para reducir a cenizas los huesos, todo indica que los restos provienen de faena clandestina", comentó Domínguez.
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El fuego, según las imágenes del video, alcanzó una intensidad notable, lo que ha llevado a los expertos a concluir que los responsables utilizaron algún tipo de combustible para encenderlo. Sin embargo, Domínguez aclaró que la grasa y los pelos de los animales faenados también contribuyeron a avivar las llamas.
La quema de estos restos animales es una práctica utilizada para borrar rastros de actividades ilegales, pero en este caso, el video y las imágenes aportadas podrían ser clave para desmantelar una operación más grande.
Con la investigación en curso y las cámaras de seguridad como recurso, las autoridades buscan esclarecer la procedencia de los restos y dar con los responsables de este delito que no solo atenta contra la salud pública, sino que también implica una crueldad hacia los animales.