Safari Tras las Sierras 2025: en La Majadita se oponen a la competencia

Cada año, previo a la realización del Safari Tras las Sierras, en San Juan se enciende la polémica. Es que la tradicional competencia motor, que atrae a miles de aficionados, tiene como escenario principal el departamento de Valle Fértil, una localidad que alberga una de las reservas naturales más importantes de la provincia, y este año, el foco de la discusión se ha centrado en la intención de los organizadores de retomar el circuito original, que atraviesa el área núcleo de la reserva. Ante ello, la comunidad de La Majadita ha elevado su reclamo, argumentando que esta zona está categóricamente protegida, lo que convierte la propuesta en ilegal, según las leyes de conservación ambiental.

“No queremos que pasen por acá, porque el impacto es tremendo y el área está protegida", dijeron los vecinos y vecinas de La Majadita en un reciente encuentro con los organizadores de la competencia. "Con tanta gente, todo se descontrola y eso ustedes lo saben, porque está documentado", aseguraron.

Los residentes de esta localidad vallista manifestaron que durante los días de la competencia no pueden salir de sus casas, debido a que la única vía de circulación se utiliza para la carrera.

“Nos obligan a quedarnos adentro. Los vehículos pasan a altas velocidades y el riego de accidentes se potencia", dijeron. "Además, nos rompen las tomas de agua, dañan la flora, tiran pañales y botellas en el ríos, y hasta tenemos que ver como la gente hace sus necesidades en cualquier lado", agregaron.

Desde la Asociación de Pilotos Vallistos (APIVA), confirmaron a través de sus redes sociales que la modalidad motos se correrá los días 7, 8 y 9 de febrero. En tanto que los autos tendrían su turno el fin de semana siguiente: 14, 15 y 16 del mismo mes. Una afirmación que hasta el momento está en dudas, ya que la competencia todavía no tiene las habilitaciones y permisos correspondientes de la Secretaría de Ambiente, el ente de control de la reserva.

El impacto ambiental y la sequía

Los principales temores de la comunidad radican en los potenciales daños a la reserva natural. La fauna y flora autóctona, que son elementos clave de la biodiversidad del departamento, podrían verse afectadas por el paso de miles de personas y vehículos en los 10 días. La contaminación de los ríos y arroyos, así como el riesgo de incendios, también son factores que preocupan a los vecinos, considerando la sequía extrema que hoy azota al Valle.

"¿Se pueden imaginar toda esa cantidad de personas circulando en el departamento? Es más del doble de la gente que vive acá. Van a tener que traer hasta gendarmería para poder controlar", dijo otra vecina. "Hoy, en Valle Fértil más del 70 por ciento de la vegetación está seca... Pregunto: ¿quién va a controlar el fuego de los que se quieran hacer una asado al costado del río o del circuito? Además, ¿quién va a abastecer de agua a toda esa gente que va a venir, si hoy el Valle Fértil no tiene agua?", Luego agregó: "Por favor, pedimos cordura". 

Los organizadores de la competencia estiman que, este año, el evento atraería a más de 25.000 espectadores.

La postura del intendente y la falta de presentación formal

En medio de este debate, el intendente de Valle Fértil, Mario Riveros, expresó su apoyo a las preocupaciones de los vecinos, pero, también a los organizadores de la competencia motor, a quienes les ha pedido que la enmarquen dentro de la legalidad.

“El Safari debe realizarse en zonas permitidas, como se hizo el año pasado. Dentro de la ley, el apoyo estará; fuera de la ley, nada”, indicó el mandatario local.

Riveros también contó que, hace un mes, recibió a los organizadores del safari y que en el encuentro les exigió que presentaran un plan de trabajo detallado, como se había hecho en años anteriores, con la colaboración de diversas dependencias provinciales. Sin embargo, hasta el momento, el gobierno municipal no ha recibido la documentación necesaria para aprobar la realización de la competencia en el circuito original.

Reclamo formal y recursos legales

Ante la falta de respuestas por parte de los organizadores y las autoridades municipales, los vallistas que se oponen a la competencia han decidido dar un paso más y llevar su reclamo directamente ante la Secretaría de Ambiente de la provincia de San Juan.

Según pudo conocer DIARIO HUARPE, esta semana presentarán formalmente un escrito en el órgano de control para exigir que se impida el paso de la competencia por la reserva natural.

En el documento, los vecinos solicitarán que se respete la normativa provincial de protección de áreas naturales, alegando que el safari no puede atravesar terrenos protegidos por ley.

Además, acompañarán la presentación con documentación que incluye resoluciones de la Defensoría del Pueblo, informes de la Secretaría de Ambiente y antecedentes de medidas cautelares tomadas en años anteriores, que impidieron la competencia por el derecho a la propiedad en La Majadita.

Las promesas de los organizadores

En un intento por reducir el rechazo de la comunidad, los vecinos de La Majadita contaron que los organizadores del Safari Tras las Sierras les ofrecieron una serie de compensaciones. Según comentaron, los de Apiva se comprometieron a entregarles dos fardos de pasto por productor y a realizar pozos de agua con la ayuda del gobierno provincial. 

Además, les aseguraron que les van a proporcionar tres stands de ventas gratuitos durante los días de la competencia y que, una vez finalizada las carreras, una empresa de limpieza se encargaría de restaurar la zona.

Como era de esperar, las promesas no fueron aceptadas y los residentes de La Majadita, siguen firmes en su postura "No queremos que el safari atraviese nuestra localidad".

¿Tradición o sostenibilidad?

Si bien, el Safari Tras las Sierras es uno de los eventos importantes del calendario deportivo de San Juan y forma parte de una tradición en la provincia, hoy, más que nunca, el cuidado del ambiente es una necesidad urgente. Y serán las autoridades provinciales las que deberán sopesar entre los intereses culturales y económicos de un sector de la sociedad, y el respeto al medio ambiente, a los derechos colectivos y las normativas vigentes.