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San Juan, entre las ciudades con peor calidad de aire del país: preocupan los efectos en la salud

Según el Índice de Calidad del Aire (IQ Air), la provincia ocupa el tercer lugar en el ranking de ciudades más contaminadas de Argentina, por detrás de Córdoba y La Rioja. La polución afecta la calidad de vida y la salud de la población.

16 de diciembre de 2024

El Índice de Calidad del Aire (IQ Air) revela datos preocupantes: San Juan es una de las ciudades argentinas con los peores niveles de calidad de aire, ocupando el tercer puesto en el ranking nacional detrás de Córdoba y La Rioja.

El informe advierte que la contaminación atmosférica en el país es alarmante, y las causas principales son tanto los incendios forestales como los altos niveles de polución.

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Según el informe, el humo generado por incendios en el territorio nacional y en países vecinos como Bolivia y Brasil contribuye significativamente al deterioro de la calidad del aire en diversas provincias. Esta situación posiciona a San Juan y otras ciudades como zonas de alto riesgo, con niveles de contaminación que superan en 1,8 veces los valores recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para garantizar un entorno saludable.

Argentina, entre los países más afectados por la contaminación atmosférica

El informe no solo refleja un problema a nivel local: en un contexto global, Argentina ocupa el puesto 101 de 134 países en el ranking de naciones más afectadas por la contaminación. Este panorama refleja una combinación de factores ambientales, crisis climáticas, crisis hídricas, incendios y emisiones industriales que afectan el aire que respiramos diariamente.

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En 2024, las 10 ciudades argentinas con los peores índices de calidad de aire son:

  1. Córdoba
  2. La Rioja
  3. San Juan
  4. San Luis
  5. Mendoza
  6. San Rafael
  7. Santiago del Estero
  8. San Miguel de Tucumán
  9. Salta
  10. Jujuy

El caso de San Juan es especialmente preocupante, ya que la combinación de sus características geográficas y climáticas hace que el impacto de la contaminación se intensifique en la calidad de vida de sus habitantes.

Una crisis que afecta la salud pública

El deterioro del aire no es únicamente un problema ambiental: también es una crisis de salud pública. Según la OMS, la polución es responsable de alrededor de cuatro millones de muertes prematuras al año en todo el mundo. Las partículas contaminantes, que se mantienen en el aire y afectan las vías respiratorias, incrementan la probabilidad de desarrollar enfermedades respiratorias y cardiovasculares.

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Los grupos más vulnerables incluyen a los niños, los ancianos y personas con problemas de salud preexistentes.

Exponerse de manera prolongada a un aire de mala calidad aumenta el riesgo de desarrollar patologías crónicas y agrava condiciones médicas ya existentes.

El llamado a la acción para mitigar el impacto ambiental y sanitario

Las estadísticas reflejan una realidad urgente: es necesario implementar políticas públicas que mitiguen los efectos de la contaminación y promuevan estrategias para el cuidado ambiental.

La calidad del aire no solo depende de acciones individuales, sino de decisiones gubernamentales coordinadas para prevenir la expansión de incendios forestales, regular las emisiones industriales y controlar el impacto ambiental de áreas sensibles en la provincia.

 

La situación es crítica, pero aún es posible revertirla con acción, colaboración y planificación estratégica.

El aire que respiramos es esencial para la vida, y garantizar su calidad es un desafío que involucra a toda la sociedad.

 

 

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