Judiciales > Grave hecho
Casi cuatro años de cárcel por darle un ladrillazo a un hombre y robarle
José María Salinas Sánchez fue sentenciado en juicio abreviado por dos hechos: intentó robar golpeando con un ladrillo a un hombre en Barrio La Estación y fue detenido por el hurto de objetos en otro caso. Ambos hechos se unificaron en una pena de cumplimiento efectivo.
POR REDACCIÓN
La Justicia de San Juan condenó a José María Salinas Sánchez a tres años y cuatro meses de prisión de cumplimiento efectivo, tras un juicio abreviado en el que se unificaron dos causas en su contra por tentativa de robo agravado y hurto simple. La resolución fue dictada por el juez Guillermo Adárvez tras el pedido de la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Propiedad, con la intervención del fiscal Cristian Catalano y su equipo.
El primer hecho ocurrió el 4 de febrero de 2025, cuando un hombre de apellido Atencio se encontraba junto a su pareja realizando una compra en un kiosco del Barrio La Estación, sobre calle Larrea. Según consta en la denuncia, Salinas intentó robarle las zapatillas, y al no conseguirlo, lo golpeó en el rostro con un ladrillo. La agresión le provocó a la víctima la pérdida del globo ocular izquierdo y una fractura de maxilar, por lo que el hecho fue calificado como robo agravado por el uso de arma impropia en grado de tentativa.
El segundo caso ocurrió el 1 de abril de 2024. La víctima, de apellido Vergara denunció que mientras se encontraba trabajando en la recolección de cartones, Salinas sustrajo de su domicilio diversos objetos, entre ellos tres paquetes de pañales descartables para adultos, tres motores de lavarropas, tres sillas de caño metálico y bolsones de lona con cartón. Ese mismo día, Salinas fue aprehendido y se le encontraron en su poder varios de los elementos denunciados como robados.
Ambos casos fueron tratados bajo la modalidad de juicio abreviado, en el que el acusado aceptó su responsabilidad. Adárvez lo condenó como autor penalmente responsable de los delitos de hurto simple y tentativa de robo agravado por el uso de arma impropia, en concurso real.
La pena fue fijada en tres años y cuatro meses de prisión efectiva, y el condenado deberá cumplirla en el Servicio Penitenciario Provincial.