Los trabajadores realizarán una huelga de 24 horas y un festival solidario. Reclaman mejoras salariales y denuncian ataques del Gobierno al sistema de salud.

Los residentes del Hospital Garrahan suspendieron su paro por amenazas de despido, pero el personal de planta continuará con las medidas de fuerza y convocó a un paro nacional.  

ATE lanzó un paro nacional en hospitales tras fracasar las negociaciones con el Gobierno por la crisis sanitaria, salarios bajos y persecución a trabajadores.  

La diputada libertaria Juliana Santillán intentó desacreditar el reclamo salarial de médicas del Garrahan citando mal el valor de la canasta básica familiar, y dejó en evidencia su desconexión con la realidad económica del país.

La oposición logró reunir quórum en Diputados y sesiona sobre temas sensibles para el Gobierno, como jubilaciones, discapacidad y emergencias climáticas.

Las autoridades del Hospital Garrahan informaron que la atención médica se mantiene sin interrupciones, aunque instaron a los residentes en formación a retomar sus funciones tras presentarles una nueva propuesta salarial.

El Gobierno dispuso una suba del 30% para médicos en formación que eleva sus ingresos a $1.300.000 a partir de julio. La medida no alcanza al resto del personal, y los gremios denuncian una estrategia para “dividir” a los trabajadores.

Tras ratificarse el paro de residentes, Nación endureció su postura: advirtió que descontará días, aplicará sanciones y podría desaprobar a quienes protesten. 

En medio de las negociaciones por mejoras salariales de los médicos del Hospital Garrahan, desde el Gobierno pidieron que se suspenda el paro por 48 horas para "dialogar" soluciones.