Publicidad

Departamentales > Drama en Rawson

Se encuentra en estado vegetativo y, junto a su familia, corre el riesgo de ser desalojada

Una mujer expuso que una Jueza de Paz dictó una orden de desalojo para febrero. La demandante se encarga de sus hijos, su madre enferma y también de su sobrino con incapacidad.

POR REDACCIÓN

24 de enero de 2025
María González (a la derecha), junto a su madre postrada en silla de ruedas. La situación familiar se agrava con el correr de los días. Foto: DIARIO HUARPE.

María Eugenia González alega que su madre reside desde hace 18 años en una casa de Villa Lerga, en Rawson, y hace un tiempo vive a contrarreloj porque le llegaron cartas de desalojo y su fecha límite es el 28 de febrero. El caso es por demás dramático: ella ahora se encuentra junto a sus hijos y también con la anciana que, luego de sufrir un accidente en enero de 2023, quedó en estado vegetativo. Además, también se encarga de cuidar la salud de su sobrino, quien presenta un cuadro de incapacidad. Por otro lado, como si fuera poco lo anterior, dijo que se acercó a explicar su situación a la Defensoría del Pueblo, al IPV, a Casa de Gobierno y al municipio de Rawson, pero no obtuvo una respuesta satisfactoria.

La situación tuvo su origen hace 18 años, según contó a DIARIO HUARPE, cuando los propietarios del domicilio le prestaron a la pareja de la madre de González, Alicia Eugenia Fernández, la casa donde actualmente viven. Cuando Fernández sufrió el accidente, su cónyuge desapareció mientras ella estaba en terapia intensiva. Seis meses después, comenzaron a recibir las cartas de desalojo a nombre de personas que no habitaban el hogar.

Publicidad

Una habitación está equipada por los cuidados que debe afrontar la anciana enferma.

Un pedido de ayuda sin respuesta

Ante esto, González decidió recurrir a la Defensoría del Pueblo. Luego de un breve juicio encabezado por la Jueza de Paz de Chimbas (no explicaron el motivo de la intervención de dicha magistrada), en el organismo estatal le aconsejaron que signe el papel porque la consecuencia sería la concreción del desalojo antes de febrero. Ante esta situación, la mujer decidió (según ella, por estar mal asesorada y obligada) firmar el documento que selló el desalojo de forma definitiva.

En este contexto, González dijo que recurrió al Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) y al municipio de Rawson, pero las respuestas no fueron las más alentadoras. "En el IPV me dijeron directamente que no fuera porque no había solución, que esperara a que ellos me llamaran", relató. Según detalló, la directora del organismo, Elina Peralta, no la recibió y desde la comuna le informaron que no podían intervenir en su situación, ya que es un caso en el que no le corresponde tomar decisiones. Además, confesó que presentó un documento en Casa de Gobierno y, de momento, no han replicado su petición.

Publicidad

Una imagen que muestra la precariedad de la vivienda.

El panorama se complica aún más cuando González relata el estado de deterioro en el que se encuentra la vivienda. "Esta casa se llueve entera. La habitación de mi mamá tiene el techo roto y no puedo permitir que se le caiga encima", contó angustiada María Eugenia.

Las últimas lluvias dañaron aún más la estructura de la casa.

La denunciante explicó que, hasta el momento, su futuro y el de su familia es incierto, ya que le queda poco tiempo en ese domicilio y, al calificarse como una persona de bajos recursos, no tiene un lugar al cual mudarse. "Lo único que quiero es una vida digna para mi mamá, mis hijos y mi sobrino”, expresó.

Publicidad

Por otra parte, manifestó que su trabajo consiste en vender panificados y, durante el fin de semana, empanadas. Aquellos que deseen ayudar a mejorar la situación de María Eugenia González y de su familia, pueden comunicarse al 264-403-7457.

Publicidad
Más Leídas
Publicidad