Policiales
Horro en Hurlingham: un joven asesinó a su amigo durante una discusión
Un joven de 18 años disparó contra su amigo de 32 en plena calle. La víctima murió en el acto.
POR REDACCIÓN
Villa Tesei, en el partido de Hurlingham, fue escenario el miércoles 29 de octubre de un hecho policial que conmocionó a los vecinos. Al mediodía, tres amigos se encontraron en la calle y, por motivos que aún se investigan, comenzaron a discutir. En ese contexto, S.L.D., de 18 años, extrajo un arma y disparó contra Diego Eduardo Conceicao, de 32 años, quien resultó herido y falleció a pocas horas.
El cómplice del atacante, E.I.M., de 17 años, fue detenido por la policía bonaerense, mientras que el autor de los disparos continúa prófugo. Según fuentes policiales, el altercado ocurrió en la intersección de Eduardo Bradley e Inés de Pons, en el límite entre Villa Tesei y El Palomar. Una cámara municipal registró el momento en que los tres se encontraban en la vía pública a bordo de bicicletas.
Según el informe, S.L.D. descendió de su bicicleta, pidió a su cómplice que sostuviera el arma y efectuó los disparos. Conceicao intentó huir, pero recibió dos impactos, uno en el tórax y otro en la pelvis. Fue trasladado de urgencia al hospital local, donde murió debido a la gravedad de las heridas.
La policía secuestró tres vainas servidas calibre .40 y un proyectil. Los efectivos de la Dirección de Policía Científica trabajan junto al Grupo Táctico Operativo (GTO) para localizar al prófugo, quien posee antecedentes por robo calificado. La investigación está a cargo de la UFI N°3 y la UFI del Joven N°2 del Departamento Judicial Morón.
En paralelo, una disputa familiar en Hurlingham terminó con otro homicidio. C.F.A., de 31 años, disparó contra Víctor Marcos Larroude, de 29, y su concuñado F.E.D., de 30. Larroude murió horas después en el hospital de General Rodríguez. C.F.A., con antecedentes por portación ilegal de arma y uso de documentos falsos, es intensamente buscado.
Los investigadores realizan allanamientos en varias viviendas del conurbano y en el Partido de La Costa, revisan cámaras de seguridad y toman testimonios para dar con los responsables. Ambos casos reflejan la violencia que puede surgir de conflictos personales y familiares, y mantienen a la policía en alerta máxima en la zona.