Publicidad
Publicidad

Política > Post derrota electoral

Reunión de Milei y Caputo con el BID tras las elecciones en Buenos Aires

El presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, mantuvieron su primer encuentro económico tras el revés electoral. Dialogaron con Ilan Goldfajn, titular del BID, sobre reformas, pobreza y los próximos desembolsos por USD 3.000 millones. 

POR REDACCIÓN

Hace 7 horas
La entidad multilateral señaló que acompañará al Gobierno en su “transformación económica”. Foto gentileza Infobae. 

En la que fue la primera actividad económica tras la derrota electoral en la provincia de Buenos Aires, el presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, se reunieron, este lunes 8 de septiembre de 2025, en la Casa Rosada, con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn. La cita marcó un nuevo capítulo en la relación entre el Gobierno argentino y los organismos multilaterales de crédito.

El encuentro, que duró algo más de una hora, contó también con la participación del jefe de Gabinete, Guillermo Francos; el secretario de Finanzas, Pablo Quirno; el jefe para el Cono Sur del BID, Morgan Doyle; y la asesora Amanda Glassman.

Publicidad

“Excelente encuentro con el presidente Milei, el ministro Caputo y el secretario Quirno en la Casa Rosada. Conversamos sobre la agenda de reformas económicas, el impulso al sector privado, la agenda de seguridad, y la integración del país en la región y el mundo”, publicó Goldfajn en su cuenta de X.

El BID es uno de los principales organismos que respaldó el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y prometió desembolsos por USD 3.000 millones durante este año, dentro de un paquete mayor de USD 10.000 millones proyectados hasta 2028. En junio, el organismo aprobó un plan trianual de financiamiento para Argentina con ese monto total.

Publicidad

La entidad multilateral señaló que acompañará al Gobierno en su “transformación económica”, con énfasis en tres pilares: reformas fiscales y eficiencia tributaria; liberalización de la economía para atraer inversión privada; y programas sociales para reducir la pobreza estructural.

A pesar del respaldo, el BID también advirtió sobre varias debilidades estructurales de la economía argentina. En un reciente comunicado, destacó la fragilidad de las reservas del Banco Central, la alta informalidad laboral (36,1%) y los preocupantes niveles de pobreza infantil, con más del 50% de los menores de 0 a 14 años afectados.

Publicidad

También alertó sobre la posibilidad de “fatiga social” frente a medidas de ajuste y la falta de apoyo político para aprobar reformas clave en el Congreso, lo que representa un riesgo relevante para la continuidad del programa económico.

En términos fiscales, el BID indicó que asistirá al Gobierno en su esfuerzo por reducir impuestos distorsivos y eliminar exenciones que erosionan la capacidad recaudadora, lo cual será clave para consolidar el equilibrio macroeconómico.

El escenario externo tampoco ofrece tregua: el organismo identificó riesgos provenientes de eventuales shocks financieros internacionales o deterioro de los términos de intercambio. Además, los próximos pagos de deuda externa –por unos USD 700 millones solo en septiembre– representan una presión directa sobre las debilitadas reservas.

Buena parte de esos vencimientos corresponden al propio BID y al Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), del Banco Mundial.

El encuentro entre Milei, Caputo y Goldfajn no solo reactivó la relación con uno de los principales prestamistas internacionales, sino que también delineó las tensiones que enfrenta el Gobierno: avanzar con reformas estructurales en un contexto de debilidad política y fragilidad económica. El apoyo del BID es importante, pero no incondicional.

Publicidad
Publicidad
Más Leídas
Publicidad
Publicidad