Comunidad > "Cacho" ya no está
Villa Allende: polémico traslado del quebracho histórico en medio de incidentes
En medio de un fuerte operativo policial, fue removido el árbol de 284 años que se convirtió en símbolo de lucha ambiental. La comunidad denunció represión, heridos y un proceso arbitrario. Para el municipio, fue un traslado “impecable”.
Este domingo al mediodía, en Villa Allende, Córdoba, el histórico quebracho blanco conocido como “Cacho” fue finalmente removido de la avenida Padre Luchesse. El árbol, de aproximadamente 284 años, resistía desde el centro de una obra de ensanche vial que busca conectar la ciudad con el Gran Córdoba. Su traslado se concretó tras semanas de vigilia vecinal, acampes, enfrentamientos con la policía, y un creciente rechazo social que terminó visibilizando el conflicto a nivel nacional e internacional.
El operativo comenzó el viernes con un amplio despliegue policial: efectivos del Grupo de Infantería, la división Canes y el Grupo de Operaciones Especiales Mencho ocuparon la zona para garantizar el ingreso de una grúa gigante perteneciente a la empresa Servigruas, especialmente contratada en Tucumán, ya que al menos nueve empresas locales habían rechazado intervenir por razones éticas o de seguridad.
Pese a las manifestaciones, a los carteles que pedían "¿Tanto cuesta hacer una curva?", y a la insistencia de los vecinos en presentar una traza alternativa, el árbol fue trasladado. Para muchos, fue un acto de “asesinato ambiental”.
Una jornada tensa, con heridos y denuncias
El sábado fue el punto más tenso. Desde la madrugada, manifestantes y ambientalistas se congregaron para bloquear el paso de la maquinaria. Convocados por la organización @quebracho284, intentaron detener el operativo con una sentada pacífica. La respuesta fue un avance de la Infantería que derivó en forcejeos, empujones y represión.
Videos y fotos mostraron a personas tiradas en el suelo, intentando frenar el avance de los vehículos. Un fotógrafo resultó herido con cortes en el rostro y otro manifestante también fue agredido, según denunció la organización vecinal. La Asamblea leyó una orden judicial que intimaba al municipio y a la provincia a presentar informes técnicos antes de avanzar con la reubicación. Pero nada detuvo a la grúa.
Para los defensores de “Cacho”, no se trataba solo de un ejemplar, sino del último quebracho blanco en pie del antiguo bosque nativo que cubría la región. Su defensa era una forma de proteger la memoria ambiental, el patrimonio colectivo y el derecho a decidir sobre el territorio.
El traslado “impecable” y el debate que sigue
Para el municipio, la operación fue un éxito. “El traslado ha sido impecable”, aseguró Felipe Crespo, secretario de Gobierno. Destacó que la raíz principal medía 3,5 metros y fue conservada. Aseguró también que se cumplió con todos los pasos técnicos recomendados: acondicionamiento del pozo, uso de compost y tierra, y seguimiento de un ingeniero agrónomo.
Pero la discusión está lejos de cerrarse. Organismos ambientales, vecinos autoconvocados y asambleas ciudadanas sostienen que se ignoraron alternativas viables y que el proceso fue impuesto con violencia institucional. La intervención judicial, la negativa de empresas locales a participar del operativo, la represión, y las imágenes virales de una comunidad resistiendo bajo la sombra de un árbol de casi tres siglos, hacen difícil cerrar la página.